Estando en el
negocio de las ventas, poco a poco e inexorablemente,
terminamos convirtiéndonos en los clientes más difíciles y
complicados que existen. Es muy fácil explicar esta
transformación:
-
Al estar en
ventas, conocemos la importancia de un cliente, por lo que
al estar del otro lado del mostrador, esperamos un trato
que sea como mínimo, EXACTAMENTE igual al que nosotros le
proveemos a nuestros clientes.
-
Sabemos cuando
el interés por nosotros es genuino, y detectamos a kilómetros
al asesor que nos ve solamente como su próxima comisión
a ganar. Obvio, no compramos y si es posible, hacemos ver
al asesor que así no se hacen las cosas (Claro, Depende
de lo aguerrido que sea cada uno, pero no es detestable
sentirse así?)
-
Somos difíciles
de convencer, críticos acérrimos del mal servicio,
regateadores, ponemos presión, discutimos y peleamos, en
fin, una verdadera pesadilla.
-
PERO, -y esto va
en MAYÚSCULAS-: "ESTAMOS SIEMPRE ESPERANDO SER
SORPRENDIDOS CON UN SERVICIO EXCEPCIONAL, UN TRATO ÚNICO
Y UNA EXPERIENCIA DE COMPRA INOLVIDABLE".
Y al estar frente a
una situación donde recibimos mucho más de lo esperado, los
"terribles" compradores que somos, nos convertimos
en clientes
predicadores de la marca, establecimiento y asesor
que nos dio tan grata sorpresa. Y ¡que difícil es hacernos
cambiar de opinión!. Pasamos de Fidelidad a Compromiso Total,
nos hacemos clientes asiduos, referimos a todo aquel que
conocemos, hablamos de nuestra experiencia cada vez que
podemos y contamos los días para volver a ese lugar, y ser
sorprendidos de nuevo.
Y como cliente
predicador (Únicamente del servicio excepcional), comparto
con ustedes una historia que tiene que ver con un ejemplo claro de
lo que el buen servicio significa, de la importancia vital de
los detalles y de lo que todo esto llega a crear dentro de la
mente y sobre todo, dentro del corazón de los clientes.
La ciudad:
Bogota, Colombia.
El Lugar:
101 Park House Hotel & Suites
Factores Diferenciadores:
Un equipo Excepcional / Entrenamiento / Gusto evidente por lo
que hacen
Después de 7 meses
sin viajar a Bogota, regreso finalmente hace un par de
semanas. La reservación la hizo la agencia de viajes, por lo
que no hubo contacto directo de mi parte con el hotel. Todas
las veces que he estado hospedado aquí, he recibido detalles
increíbles: tarjetas de felicitación el día de mi cumpleaños,
el happy birthday cantado por miembros del equipo a la puerta
de mi habitación, siempre un saludo amable y cordial, por
supuesto TODOS me tratan por mi nombre y me hacen sentir como
en casa. Sin olvidar detalles como la vez que olvide mi cámara
fotográfica y la cuidaron por meses, la vez que deje dinero
en efectivo en la recepción y Don Mario (Buen amigo y Taxista
del Hotel) regreso hasta el aeropuerto a dármelo, en fin, un
sin numero de agradables detalles que me fueron haciendo un
cliente no solo fiel, sino comprometido y predicador del
hotel.
Esta visita a
Bogota, no fue la excepción. Al entrar a mi cuarto me lleve
la sorpresa de que el personal, por iniciativa propia ( creo
que no lo habían hecho nunca) había decorado mi habitación
con globos y mensajes de bienvenida que simplemente me dejaron
mudo. Había un mensaje pegado en el techo, justo arriba de la
cama que me daba la bienvenida, así que incluso al momento de
ir a dormir, fui objeto de esta sorpresa que fue simplemente
inolvidable.
Empresas como las
que menciono, son capaces de convertir al cliente más difícil,
en un fanático de su servicio. La pregunta que surgió en mi
mente y que me llevó a redactar esta historia es:
-
¿ESTAMOS A ESTE NIVEL DE SERVICIO DENTRO DE
NUESTRA
EMPRESA?
-
¿CUANTOS CLIENTES
FANÁTICOS Y PREDICADORES
ANDAN
POR AHÍ HABLANDO BIEN DE NUESTRO SERVICIO?
-
¿ESTAMOS SEGUROS DE QUE EXISTEN?
-
¿PODEMOS DECIR SUS NOMBRES EN ESTE MOMENTO?
-
¿TENEMOS DETALLES QUE NOS HAGAN ÚNICOS?
-
¿QUE HACEMOS PARA ENTRAR EN LA PSIQUE DE
NUESTROS
CLIENTES Y CONVERTIRNOS EN SU TOP OF MIND?
-
¿CUÁNTOS DE NUESTROS CLIENTES SE
QUEDARÍAN CON
NOSOTROS SIN IMPORTAR PAGAR MAS O ESPERAR UN POCO
MÁS PARA
OBTENER EL PRODUCTO O SERVICIO DE NUESTRA
MARCA?
-
¿CUÁNTOS CLIENTES TENEMOS, TAN APASIONADOS POR
NUESTRO SERVICIO, QUE ESCRIBIRÍAN GRATIS UN ARTICULO SOBRE
NOSOTROS?
La fidelidad del
cliente es un MITO. La fidelidad se pierde en cualquier
momento si no existe un COMPROMISO REAL con nosotros. Ese es
el quid de nuestro trabajo, generar compromisos a largo plazo
mediante experiencias inolvidables y sobre todo, adictivas.
No buscar clientes fieles, sino clientes predicadores
es nuestra misión. UN cliente aprueba de balas, a prueba de
ataques de la competencia, un cliente convencido de que si no
es con nosotros, mejor no hay negocio. Así o más fácil?
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